Dedicado a mi amigo Santi,
uno de esos locos.
Con la cantidad de editoriales que publican guías para no perderse nada de tal o cual lugar, hoy en día viajar por libre está al alcance de muchas personas, entre las que me incluyo. Los turistas nos empeñamos en seguir unos hitos colocados por otros, y tratar de cumplir el recorrido fielmente para que tus amigos y conocidos no te reclamen a tu regreso si estuviste en este o aquel sitio. Por eso no resulta fácil encontrar parajes desconocidos o poco visitados.
En México, hemos tenido la suerte de encontrar uno de esos paisajes únicos. Un lugar mágico y misterioso creado por un excéntrico millonario que “dilapidó” la herencia de su familia patrocinando el mecenazgo de artistas como Dalí, Magritte o Picasso. Despreció las rentabilidades que le propondrían sus administradores y se empeñó en obtener otro tipo de beneficio: el artístico, ese que no eres capaz de verlo cuando lo tienes delante de tus narices y que al paso de cien o doscientos años se expone en los mas insignes museos del mundo, para que los admiren aquellos entendidos que en su día llamaron locos a esos artistas.
Ese poeta ingles, llamado Edward James, tras su mecenazgo a los artistas de vanguardia del siglo XX, se trasladó a un recóndito lugar al norte de Querétaro. Un pueblecito llamado Xilitla situado dentro de la Sierra Gorda. Xilitla está prácticamente colgado de las montañas y camuflado por la selva. Cuentan que una mañana, mientras el Sr. James se bañaba bajo unos saltos de agua paradisíacos, recibió la visita de "decenas de mariposas" (según sus palabras) e interpretó que aquel lugar era propicio para su propia creación. Por ello compró un enorme trozo de selva y comenzó la construcción de unos edificios de hormigón surrealistas y absurdos que están perfectamente en armonía con el paisaje.
Los edificios, bien podrían haber sido inspirados por los dibujos de MC Escher: columnas que se asemejan al bambú, capiteles en forma de hojas que no sujetan ninguna planta, escaleras de caracol que no llegan a ningún sitio, escaleras desprovistas de barandillas que ascienden y descienden sin sentido, habitaciones colgadas de árboles que recuerdan a Alicia en el País de las maravillas, columnas en forma de serpientes, todo sin una forma conocida, sin lógica, como brotadas de un sueño o de una pesadilla...
El lugar es un completo laberinto, con túneles entre la vegetación y caminos que se pierden en la maleza o que llegan a otros edificios perdidos y aún más extraños. En mi opinión, una absoluta maravilla, pues además de ello, debido a que todo el mundo lo calificó de millonario loco, el lugar esta prácticamente sumido en el abandono y la naturaleza lo ha adoptado como suyo mezclándose con sus formas, lo cual lo hace más maravilloso aún.
Junto a este parque puedes encontrar las pozas a las que Edward James también dio su toque artístico creando unas piscinas surrealistas con saltos, figuras y toboganes. El baño es una auténtica delicia, sobre todo después de soportar el calor y la humedad de este lugar.
Hace unos días leí una frase de George Lucas que decía: "En el arte. Si eres faraón puedes construir pirámides". Ojalá que el dinero, de vez en cuando caiga en manos de estos locos capaces de construir los sueños.
En esta ocasión me ha resultado muy difícil seleccionar algunas fotos para ilustrar la crónica, por ello os dejo un vídeo presentación para que os podáis hacer una mejor idea de este ensoñador paraje. Espero que os guste
En esta ocasión me ha resultado muy difícil seleccionar algunas fotos para ilustrar la crónica, por ello os dejo un vídeo presentación para que os podáis hacer una mejor idea de este ensoñador paraje. Espero que os guste
PROXIMAMENTE MEXICO VII: UN INTERMEDIO EN LA HISTORIA (Crónica final)
Fascinante.
ResponderEliminarGracias Mauri!!!
ResponderEliminarPedro, muy linda la peli.
ResponderEliminarLas cosas cambiaron: Xilitla fue nombrado Pueblo Mágico en 2011, como San Miguel Allende, por ejemplo. Ahora aparece en las guías y no está abandonado.
Ya no podré verlo como tú lo viste...
ohhhhhhh!!!
EliminarDeseando ir. Fantástico.
ResponderEliminar